Está claro que cada restaurante o bar de tapeo tiene su propio menú y, por lo tanto, es normal que cada establecimiento tenga sus platos estrella y sus diferencias. Por ejemplo, en un bar de tapas vasco no sería normal encontrar “cazón en adobo” pero sí “chipirones en su tinta”, y del mismo modo, cada establecimiento tiene un tipo de postre, u otro. Ahora bien, hay un postre en concreto que creo que todos deberían tener. Pega con cualquier menú, gusta por igual a adultos y niños, y es fácil de preparar. ¿Sabéis de qué os hablo? El brownie.
Para quien no lo sepa, el brownie es un bizcocho de chocolate con nueces fruto de un accidente culinario, un error de un cocinero que olvidó poner levadura al bizcocho de chocolate que estaba elaborando, pero ¿cómo no iba a estar bueno con estos ingredientes como base? Nació En Estados Unidos, a finales del siglo XIX y aunque ahora mismo cuenta con una gran lista de variedades, el original es de chocolate con nueces y sin levadura.
Ahora mismo podemos encontrar brownies de todo tipo en la palestra de la gastronomía dulce, desde brownie de frambuesas y chocolate blanco hasta el brownie de chocolate y caramelo, muy empalagoso para mi gusto pero que hace las delicias de los paladares más dulces. Y os preguntaréis ¿a qué brownie me refiero yo? Por supuesto, al clásico.
Hay miles de cremosos y sabrosos postres que un restaurante podría tener, o un bar de tapas. Según nos cuentan desde Confitería San Joaquín son muchos los restaurantes que les encargan ciertos dulces para crear suculentos postres de menú con ellos y, en muchos casos, hablamos de dulces con chocolate.
Además, con los nuevos adelantos podemos prepararlo en cuestión de minutos. Os dejo una receta del brownie que hacemos en mi restaurante con un robot de cocina que para cosas artesanales no sirve pero que para cosas así te allana mucho el camino.
Receta de Brownie para Robots de Cocina
Antes de nada he de citar el blog de donde saqué la receta, que es una auténtica maravilla Se trata de Mycook.es. Y ahora sí, arremangaos que empezamos.
Ingredientes:
- 125 gramos de nueces
- 150 gramos de chocolate
- 100 gramos de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- 150 gramos de azúcar
- 2 huevos
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 70 gramos de harina de trigo
- 1 pizca de sal
Elaboración:
- Pon las nueces en la jarra de Cecomix Plus y pícalas unos 5 segundos a velocidad 3. Retíralas y reserva.
- A continuación pon el chocolate en trozos en la jarra y trocea primero con unos golpes de turbo, y seguidamente 5 segundos a velocidad 10. Retira el chocolate y reserva.
- Pon la mariposa en las cuchillas, añade la mantequilla a temperatura ambiente, el azúcar, los huevos, el extracto de vainilla y mezcla 5 minutos, a 37º, y velocidad 2.
- Incorpora la harina, el chocolate, la pizca de sal y mezcla 5 segundos a velocidad 3
- Quita la mariposa, agrega las nueces y mezcla suavemente con una lengüeta.
- Pon la mezcla en una cubeta previamente engrasada y con un disco de papel vegetal en la base, incluso puedes poner una tira de papel larga que sobresalga por debajo del disco, a modo de asas para desmoldar más fácilmente.
- Programa tu olla GM en menú Horno a 130º durante 30 minutos. Al terminar el tiempo pincha con un palillo de brocheta, si saliera con masa cruda, agrega 10 minutos más.
- Finalizado el tiempo, apaga la olla, retira la cubeta y deja reposar 10 minutos antes de desmoldar.
Os diré que este brownie es especialmente esponjoso y deja un sabor de chocolate en la boca que es una auténtica maravilla.
Para presentarlo basta con ponerle un poco de nata montada en un lateral o servirlo con una bola de helado de vainilla encima, con un poco de sirope de chocolate a modo decorativo sobre esta. También podemos ponerle adornos encima, sobre todo cuando es para un menú infantil. Hasta la fecha yo he probado con lacasitos, conguitos, m&m, e incluso con una barra de toblerone rallada encima del bizcocho. Este último fue todo un acierto pero triunfó más entre los adultos que entre los niños, quienes prefieren los lacasitos y los m&m antes que todo lo demás.
¿Y tú, incluirías este postre en tu carta?