Si deseas reunir tus mejores recetas para publicar un libro que puedas compartir con el resto del mundo, estos son los puntos básicos que has de tener en cuenta para tener éxito en tu objetivo.
- Elige el tema o el título de tu libro. Deberás ofrecer un producto que te diferencie del resto de libros de cocina del marcado atrayendo a los cocinillas o futuros cocinillas a los que puedan interesar tus recetas: recetas tradicionales, vegetarianas, repostería, étnica, baja en calorías…
- Identifica al público al que va destinado el libro: estudiantes recién independizados, novatos, deportistas, personas a dieta, diabéticos, golosos… Puedes investigar para averiguar qué tipo de público es el que más consume libros de recetas y así asegurarte una cota de mercado más amplia.
- Debes asegurarte de que el contenido está perfectamente redactado y completo (cantidades, explicación paso a paso, valoración del tiempo de realización y dificultad de la tarea…). Si se trata de un libro que apuesta, por ejemplo, por una cocina económica en tiempo de crisis, puedes incluir un presupuesto de coste de cada receta. Si se tratara de un libro de recetas de cocina extranjera, para la cual puede haber ingredientes difíciles de encontrar, sería conveniente incluir una introducción o cualquier otro tipo de apartado en el libro donde se especifique en qué clase de establecimientos pueden conseguirse los ingredientes, procedencia y tradición de las recetas, etc. Se trata de valores añadidos que aumentarán la calidad del libro.
- En un recetario son muy importantes las fotografías. El diseño, la portada y la disposición de los interiores son algunos de los elementos que determinan más la compra o simplemente que el posible comprador lo escoja de la estantería para hojearlo. Por ello es importante que nosotros mismo o el editor dispongan de un equipo de diseño y fotografía especializado en este ámbito.
- Revisa otros libros de cocina para tomar ideas y elegir aquellos aspectos que te interesen para el tuyo. Las ediciones artísticas, coloridas y visuales tienen muchos puntos ganados, junto con la practicidad.
- Elige una pauta y síguela. Procura que la disposición del texto y los contenidos sea similar en todas las recetas en cuanto a ubicación de los ingredientes, descripción y cualquier otra información que desees añadir. La organización es importante.
- Crea un glosario con todo el vocabulario técnico o específico que utilices en tu recetario, especialmente para ingredientes o utensilios que puedan ser desconocidos para el lector. Procura no dar demasiadas cosas por sentadas y ayudar al cocinero poco experimentado a realizar también tus recetas.
- En tus negociaciones con el editor, procura que el diseño de la portada y los interiores representen realmente el producto que te dispones a vender. El formato debe ser lo más práctico posible. Las encuadernaciones en espiral permiten tener el libro abierto sobre la mesa o un atril mientras cocinamos, para ir consultando los pasos a seguir en cada momento.